RIESGO KIM JONG UN

PROBABILIDAD DE CONTENCIÓN
 

I. CONTENCIÓN CULTURAL Y NARRATIVA HISTÓRICA

¿Existen en Corea del Norte elementos culturales que funcionen como freno moral o simbólico al uso del arma nuclear?

En la mayoría de los países con capacidad nuclear, el uso de la bomba está rodeado de un tabú colectivo: una memoria de Hiroshima y Nagasaki, una ética del límite, una educación sobre las consecuencias.

Pero Corea del Norte nunca lanzó una bomba. Nunca fue bombardeada con una.
Y nunca construyó una narrativa crítica del poder nuclear. Más bien al contrario: el desarrollo nuclear es motivo de orgullo nacional. Se enseña como una hazaña científica, un símbolo de dignidad, una herramienta de resistencia contra la opresión imperialista.

Rasgos clave de la narrativa norcoreana:

El programa nuclear como “logro de la Revolución”
La bomba no es vista como un mal necesario, sino como una expresión del genio nacional. Ha sido exaltada como el arma que “garantiza el futuro del pueblo coreano frente a sus enemigos.”

Ausencia de crítica histórica o ética interna
No existe en la educación oficial norcoreana ningún tipo de reflexión ética sobre los límites de la violencia armada. La historia se enseña como una lucha continua entre Corea y el mundo exterior.

Glorificación del sacrificio nacional
La narrativa cultural premia la resistencia suicida, el martirio heroico, la idea de que morir con dignidad es preferible a vivir con humillación.

Tabú occidental invertido
Mientras el resto del mundo ve en la bomba una advertencia, Corea del Norte la ve como una liberación del chantaje occidental.

Cultura de obediencia y silencio
No existen espacios de discusión crítica. La propaganda penetra todos los ámbitos: escuela, familia, trabajo, entretenimiento. La posibilidad misma del debate sobre el uso de la bomba está censurada antes de nacer.

NIVEL DE CONTENCIÓN CULTURAL: 5/20

Corea del Norte no solo carece de frenos culturales al uso nuclear, sino que ha creado un marco simbólico donde su uso sería legítimo, glorioso e incluso inevitable. La contención moral ha sido sustituida por una épica de resistencia atómica.

MIEDO COLECTIVO A LA REACCIÓN GLOBAL

¿Qué tan fuerte es la presión internacional real que podría disuadir a Kim Jong Un de usar armamento nuclear?

Este freno opera bajo un supuesto: que el líder, incluso el más autoritario, teme las consecuencias de cruzar el umbral nuclear. Pero en el caso de Corea del Norte, el equilibrio es frágil. Kim no es suicida, pero tampoco es convencional. Sabe que una acción nuclear implicaría una respuesta global. La pregunta es: ¿cree que esa respuesta es inevitable, negociable o, incluso, resistible? Y aquí es donde el miedo se convierte más en cálculo que en freno.

Elementos clave del análisis:

Presión militar directa: casi inexistente

• Corea del Norte tiene una posición geográfica y militar difícil de invadir.
• Corea del Sur no tiene autonomía suficiente para actuar sin EE.UU.
• Japón no posee armamento nuclear.
• La OTAN, directamente, está fuera del radio de acción.
  Conclusión: el miedo a una guerra convencional no es realista.

Temor a una represalia nuclear estadounidense

Este es el único freno potencialmente disuasivo. Pero depende de la voluntad del presidente de EE.UU. en ese momento, del tipo de ataque previo y de su blanco. Además, si Kim actúa bajo una lógica de “no tengo nada que perder”, este freno se diluye peligrosamente.

Presión diplomática e impacto de sanciones

Corea del Norte ya está profundamente sancionada y aislada. Más sanciones no cambiarían su situación sustancialmente. De hecho, el régimen ha capitalizado políticamente ese aislamiento: lo vende como prueba de su independencia heroica.

Relación con China y Rusia: escudo geopolítico parcial

China y Rusia no avalarían un ataque nuclear, pero su política de “no intervención” ya ha demostrado ser útil para Pyongyang. Es poco probable que corten completamente sus lazos con Corea del Norte, incluso si la situación escala.

Resultado: no son frenos, sino márgenes de maniobra.

Historial de impunidad escalada

Kim ha realizado pruebas nucleares y lanzamientos balísticos en flagrante violación de acuerdos… y nunca ha pagado un precio real. Eso refuerza una narrativa de invulnerabilidad.

NIVEL DE MIEDO COLECTIVO:11/20

Kim no es completamente inmune al miedo, pero sí altamente resistente a él. El temor a la reacción global existe, pero no está bien anclado. El sistema internacional ha demostrado ser ineficaz para frenar al régimen norcoreano, y las pocas líneas rojas que podrían disuadir a Kim (como un contraataque nuclear estadounidense) dependen de variables que él podría malinterpretar o decidir ignorar en un momento de crisis. El miedo global, en este caso, no frena: apenas roza.